Nepoarchivos
sábado, marzo 26
Mitos y leyendas del macho "epañó"
Acabo de leer la supuestamente verídica aventura sexual de un casanova al estilo de Parla, en la cual relata un revolcón con desconocida, adornado con sábanas negras de raso, fresas con champagne, cuerpos sudorosos y cinco horas de coito con las uñas de la susodicha clavadas en su espalda.
Como no es cuestión de atacar al pobre muchacho que habrá hecho un esfuerzo de imaginación sobrehumano adornando el relato con porcelanas de Lladró y palilleros de conchitas "recuerdo de Benidorm" (para la colección Jaio-la-espía), vamos a destrozar mitos eróticos absurdos en plan yonomiroanadie:
Las sábanas de raso negras, lo siento, son más frías que el culo de drácula, resbalan que es un gozo y suelen pesar más de la cuenta, por lo que al final terminan en el suelo con un sluipss de lo más ridículo, mientras tú haces aspavientos con las manitas intentando recogerlas. Si de verdad quieres quedar como un sietemachos, más te vale ceñirte al algodón Carrefour y no ver tanto telefilme ochentero en antena 3. Descartado el mito uno.
Las fresas son pequeñas y deliciosas con cava, de acuerdo, pero..¡ay amigo! en Madrid se degusta poca fresa o ninguna. Lo que llega a nuestros supermercados se llama fresón y es unas tres veces más grande que la fresa. Es decir..que para comerte eso tienes que abrir una boca del tamaño de un boniato y, claramente, poca sensualidad destilas. Eso sin contar con que no te lo comes de una vez y te tiras tres minutos mascando como un mandril. Nah..descartado también el mito dos, sin necesidad de añadir que el cava da gases y que los gases solo pueden llevar al desastre si estás hurgando por ahí abajo.
Al sudor más vale tenerlo a raya con aire acondicionado o toallita de felpa, porque entre dos cuerpos hace un efecto de ventosa, productor de un ruidillo de pedo en la penetración, ideal para una peli de los Monty Phyton, pero no para enmarcar en plata una aventura sexual. Mito tres descartado, y terminamos con las uñas en la espalda: Si te marcan las uñas en la espalda durante cinco horas demuestras que solo has sido capaz de la postura del misionero ¡¡en 300 minutos!!, con lo cual...hijo mío, por los dioses de la gran verga, a ver si improvisas un poquito más y descubres que te puedes poner de pie mientras copulas y no se cae el mundo, coño.
(nepomuk con la orquesta filarmonica de Linda Blair entre una tetilla y otra)
Como no es cuestión de atacar al pobre muchacho que habrá hecho un esfuerzo de imaginación sobrehumano adornando el relato con porcelanas de Lladró y palilleros de conchitas "recuerdo de Benidorm" (para la colección Jaio-la-espía), vamos a destrozar mitos eróticos absurdos en plan yonomiroanadie:
Las sábanas de raso negras, lo siento, son más frías que el culo de drácula, resbalan que es un gozo y suelen pesar más de la cuenta, por lo que al final terminan en el suelo con un sluipss de lo más ridículo, mientras tú haces aspavientos con las manitas intentando recogerlas. Si de verdad quieres quedar como un sietemachos, más te vale ceñirte al algodón Carrefour y no ver tanto telefilme ochentero en antena 3. Descartado el mito uno.
Las fresas son pequeñas y deliciosas con cava, de acuerdo, pero..¡ay amigo! en Madrid se degusta poca fresa o ninguna. Lo que llega a nuestros supermercados se llama fresón y es unas tres veces más grande que la fresa. Es decir..que para comerte eso tienes que abrir una boca del tamaño de un boniato y, claramente, poca sensualidad destilas. Eso sin contar con que no te lo comes de una vez y te tiras tres minutos mascando como un mandril. Nah..descartado también el mito dos, sin necesidad de añadir que el cava da gases y que los gases solo pueden llevar al desastre si estás hurgando por ahí abajo.
Al sudor más vale tenerlo a raya con aire acondicionado o toallita de felpa, porque entre dos cuerpos hace un efecto de ventosa, productor de un ruidillo de pedo en la penetración, ideal para una peli de los Monty Phyton, pero no para enmarcar en plata una aventura sexual. Mito tres descartado, y terminamos con las uñas en la espalda: Si te marcan las uñas en la espalda durante cinco horas demuestras que solo has sido capaz de la postura del misionero ¡¡en 300 minutos!!, con lo cual...hijo mío, por los dioses de la gran verga, a ver si improvisas un poquito más y descubres que te puedes poner de pie mientras copulas y no se cae el mundo, coño.
(nepomuk con la orquesta filarmonica de Linda Blair entre una tetilla y otra)
Archivos
enero 2005 febrero 2005 marzo 2005 abril 2005 mayo 2005 junio 2005 julio 2005 agosto 2005 septiembre 2005 octubre 2005 noviembre 2005 diciembre 2005 enero 2006 febrero 2006 marzo 2006
