Nepoarchivos
martes, julio 12
Y es que soy yo
Me llamaron de la fundación que subvenciona mis becas, para ofrecerme un puesto de maquetador gráfico. Mi primer trabajo (legal). Mi primera entrevista (formal).
Paco-Dragón me había agarrado del pescuezo a la altura del ascensor diciéndome –pero ¿¿vas a ir en peto y alpargatas??- (que viene a ser “das asco” en lenguaje cariñoso) y me había obligado a ponerme uno de sus conjuntitos formales pantalón-camisa que, of course, me sentaba igual de bien que un abanico de marabú a Teresa de Calcuta. Al verme con esa pinta de meapilas en el espejo, yo había pensado “mal presagio” optando por callar, visto el entusiasmo de mi compañero en peinar mi imposible cabeza con 10 litros de “agua de peinado” garnier.
Así que ya, completada mi transformación en Milikito (cuando aún llevaba cencerro), he puesto rumbo a mi ejecución, absolutamente seguro de que aquello sería una catástrofe. Eso sí, Paco ha tenido el gesto de asomarse al balcón para decirme –buena suerteeee.. miente muchooo arieeeeel…- pero como aún no se me habían despegado las orejas atrapadas en Garnier, yo sólo he oído –teeee…chooo…eeeel…- y, dando por hecho que ya había vuelto a su costumbre de esnifar mis rotuladores, no he hecho mucho caso y me he encaminado al metro taciturno, pensando “mal presagio…”.
“Siéntate, Ariel”. Me hundo en la silla ¡flounf!. Las rodillas en la nariz. Se me ahuecan los bolsillos. Se me caen las llaves ¡sclengs! “ay, perdon”, “nada, tranquilo, cuéntame, ¿experiencia?” “sí, maquetaba el periódico del ceu” ¡sclengs! “ay perdón” “no pasa nada ¿el periódico, dices?” “sí, sí señor.” “aja, ¿y manejas los programas de adobe?” ¡sclengs! “lo siento es…el pantalón” “tranquilo” “Pues si, manejo adobe, quarkxpréss…” ¡sclengs! “casi mejor dejas las llaves aquí...” ¡sclengs! “perdón, son los nervios” “ya, ehm…eres joven, supongo que serás seguidor del pingüino” “pues... no señor, prefiero los gatos” ¡sclengs! “de verdad, Ariel, déjalas aquí mejor”, “no, ya está, las dejo en la mano”, “como quieras, esto…con lo de pingüino me refería a linux” “ah.. oh…no, linux no sé” ¡sclengs!…
Mi primer trabajo (legal). Mi primera entrevista (formal). Mi primer ridículo (laboral). Qué emoción...ya soy un milikito adulto.
Paco-Dragón me había agarrado del pescuezo a la altura del ascensor diciéndome –pero ¿¿vas a ir en peto y alpargatas??- (que viene a ser “das asco” en lenguaje cariñoso) y me había obligado a ponerme uno de sus conjuntitos formales pantalón-camisa que, of course, me sentaba igual de bien que un abanico de marabú a Teresa de Calcuta. Al verme con esa pinta de meapilas en el espejo, yo había pensado “mal presagio” optando por callar, visto el entusiasmo de mi compañero en peinar mi imposible cabeza con 10 litros de “agua de peinado” garnier.
Así que ya, completada mi transformación en Milikito (cuando aún llevaba cencerro), he puesto rumbo a mi ejecución, absolutamente seguro de que aquello sería una catástrofe. Eso sí, Paco ha tenido el gesto de asomarse al balcón para decirme –buena suerteeee.. miente muchooo arieeeeel…- pero como aún no se me habían despegado las orejas atrapadas en Garnier, yo sólo he oído –teeee…chooo…eeeel…- y, dando por hecho que ya había vuelto a su costumbre de esnifar mis rotuladores, no he hecho mucho caso y me he encaminado al metro taciturno, pensando “mal presagio…”.
“Siéntate, Ariel”. Me hundo en la silla ¡flounf!. Las rodillas en la nariz. Se me ahuecan los bolsillos. Se me caen las llaves ¡sclengs! “ay, perdon”, “nada, tranquilo, cuéntame, ¿experiencia?” “sí, maquetaba el periódico del ceu” ¡sclengs! “ay perdón” “no pasa nada ¿el periódico, dices?” “sí, sí señor.” “aja, ¿y manejas los programas de adobe?” ¡sclengs! “lo siento es…el pantalón” “tranquilo” “Pues si, manejo adobe, quarkxpréss…” ¡sclengs! “casi mejor dejas las llaves aquí...” ¡sclengs! “perdón, son los nervios” “ya, ehm…eres joven, supongo que serás seguidor del pingüino” “pues... no señor, prefiero los gatos” ¡sclengs! “de verdad, Ariel, déjalas aquí mejor”, “no, ya está, las dejo en la mano”, “como quieras, esto…con lo de pingüino me refería a linux” “ah.. oh…no, linux no sé” ¡sclengs!…
Mi primer trabajo (legal). Mi primera entrevista (formal). Mi primer ridículo (laboral). Qué emoción...ya soy un milikito adulto.
Archivos
enero 2005 febrero 2005 marzo 2005 abril 2005 mayo 2005 junio 2005 julio 2005 agosto 2005 septiembre 2005 octubre 2005 noviembre 2005 diciembre 2005 enero 2006 febrero 2006 marzo 2006
