Nepoarchivos
jueves, noviembre 24
Billy the bocazas kid
El vasco me cuenta que adornando la casa por Navidad es el rey, y me explica con pelos y señales los oropeles que va a desplegar este año cuando hacia Belén vaya una burra rin-rin. Yo le digo que soy aún mejor y me invento que nosotros también vamos a llenar la casa de pompones y chinchines, a lo que él, mirando desafiante, contesta –Es IMPOSIBLE que tu belén sea mejor que el mío.- Yo, chulito, palpo mi revolver y le digo que lo IMPOSIBLE es que el suyo sea mejor que el mío, justo para que suene de fondo Ennio Morricone, una borra de paja ruede por la llanura polvorienta, el barman se esconda bajo la barra, la chica del can-can deje de cantar y el vasco diga...-Muy bien. Te reto.-
Hala. Duelo de belenes en el bloque 1 piso 6. Y como soy el cowboy más duro al oeste del distrito centro, ni me inmuto cuando me enseña las fotos de su belén 2005 y veo las montañas de papel maché, el musgo natural, las figuritas pintadas a mano, el riachuelo con rueda de molino accionada por motorcillo-vayapordios. Es más... apenas levanto una ceja cuando me muestra el castillo de Herodes con puerta abatible, guardias uniformados y ventanitas esmeriladas. Y permanezco impasible cuando saca la pequeña chimenea de arcilla con bombillita de fuego incorporada para el interior del pesebre, e incluso me permito la licencia de señalarle que entre los bueyes y mulas de la época, no había costumbre de asar boniatos.
Y después, calándome el sombrero friamente al estilo Clint, chasqueo las espuelas y regreso a mi casa, donde cerraré la puerta y haré un inventario mental rápido para darme cuenta que, considerando que en mi último portal de Belén, los power-rangers llevaron oro, incienso y mirra al spiderman que dormía en el pesebre de una de caja de galletas cuétara, entre la vírgen clic de famobil y el sanjosé-homer simpson, lo tengo más bien tirando a crudo con cierto toque de aydemí para poder salir triunfante de este duelo.
Hala. Duelo de belenes en el bloque 1 piso 6. Y como soy el cowboy más duro al oeste del distrito centro, ni me inmuto cuando me enseña las fotos de su belén 2005 y veo las montañas de papel maché, el musgo natural, las figuritas pintadas a mano, el riachuelo con rueda de molino accionada por motorcillo-vayapordios. Es más... apenas levanto una ceja cuando me muestra el castillo de Herodes con puerta abatible, guardias uniformados y ventanitas esmeriladas. Y permanezco impasible cuando saca la pequeña chimenea de arcilla con bombillita de fuego incorporada para el interior del pesebre, e incluso me permito la licencia de señalarle que entre los bueyes y mulas de la época, no había costumbre de asar boniatos.
Y después, calándome el sombrero friamente al estilo Clint, chasqueo las espuelas y regreso a mi casa, donde cerraré la puerta y haré un inventario mental rápido para darme cuenta que, considerando que en mi último portal de Belén, los power-rangers llevaron oro, incienso y mirra al spiderman que dormía en el pesebre de una de caja de galletas cuétara, entre la vírgen clic de famobil y el sanjosé-homer simpson, lo tengo más bien tirando a crudo con cierto toque de aydemí para poder salir triunfante de este duelo.
Archivos
enero 2005 febrero 2005 marzo 2005 abril 2005 mayo 2005 junio 2005 julio 2005 agosto 2005 septiembre 2005 octubre 2005 noviembre 2005 diciembre 2005 enero 2006 febrero 2006 marzo 2006
